Olvídate de grandes reformas o de inversiones astronómicas para renovar el mobiliario. En ocasiones, transformar por completo una estancia es tan simple como dar un aire nuevo a las paredes. Un revestimiento diferente puede convertir una habitación sosa y aburrida en un espacio lleno de vida, así que apunta estas tendencias para dar un aire nuevo a tu casa.
La solución habitual, cuando queremos cambiar las paredes, es armarse con brocha y rodillo y ponerse a pintar. En los últimos años, las modas han llevado a nuestras casas colores vivos y alegres pero, sin embargo, las tendencias vuelven cada vez más a tonos naturales. Sin ir más lejos, Pantone considera el Rosa Cuarzo el color que marcará 2016, aunque también recomienda el uso de otros como el melocotón o los tonos café e, incluso, colores más neutros como el azul cielo o los grises azulados.
Se trata de colores capaces de dar vida a cualquier espacio, pero que, particularmente, encajan a la perfección en el baño por su facilidad de combinación y por la gran armonía que transmiten estos tonos. En esta línea, la cerámica Bombay de Gala ofrece una elegante solución en colores naturales (beige, aqua, malva, azul y marrón) que, en combinación con una malla que juega con diferentes tonos, permite crear espacios modernos y juveniles.
Muchas veces, ni siquiera es necesario “vestir” todas las paredes para transformar la habitación. Al contrario, dar protagonismo a una sola pared es una solución elegante y duradera (tardarás más en aburrirte) que, además, amplía las posibilidades decorativas hasta el infinito: combinaciones de colores imposibles, lisos con motivos florales o geométricos, etcétera.
El papel pintado es una de las soluciones decorativas más comunes a la hora de armar estas combinaciones, pero la cerámica puede ser también, hoy en día, una gran aliada. Fíjate, si no te lo crees, en este baño en el que, revistiendo solamente una pared con la cerámica Medici de Gala y en combinación con la colección Florencia, se ha logrado dar al espacio un toque realmente sofisticado.
Y la cerámica, además, ofrece importantes ventajas sobre el papel: es más duradera y mucho más fácil de limpiar.
Si lo tuyo son los cambios un poco más sutiles, no hay problema. En ocasiones, cubrir solo una parte de la pared tiene un efecto tan resultón como efectivo. Por ejemplo, para la cocina es una buena idea crear un mosaico de cerámica a media altura. Lograrás un aire mucho más actual y centrarás toda la atención en esa pared. Inspírate en las posibilidades que ofrece la colección Bari, de Gala, para personalizar de forma muy sencilla tu cocina o comedor.
Otra solución que dará personalidad a tus paredes es buscar un elemento que te gustaría destacar y hacer girar el diseño de la habitación en torno a él. Por ejemplo, puedes jugar con molduras para crear un marco alrededor de tu cuadro favorito y convertirlo en el centro del dormitorio o el salón.
¿Y qué tal si creas una cenefa en el baño a la altura del espejo? Lograrás un efecto original y muy creativo en la pared del lavabo y, de paso, aportar dinamismo a toda la estancia, tal y como vemos en la siguiente imagen, donde se han combinado magistralmente la cerámica plana gris y las piezas en forma de mosaico de la colección Aitana de Gala.