Una apuesta de Burgos por la modernidad de la mano del arquitecto Juan Navarro Baldeweg, autor de esta gran caja de luz acristalada por sus cuatro paredes y techo, que reproduce la sierra de Atapuerca. El Museo de la Evolución Humana de Burgos (MEH), se sitúa a una hora y media de los Yacimientos de Atapuerca, considerados Patrimonio de la humanidad, y gira alrededor de las tres grandes preguntas: ¿A dónde vamos? ¿Quiénes somos? y ¿De dónde venimos?
Para ello, el MEH se ha convertido en un centro divulgativo y lugar de exhibiciones, donde siempre se pueden visitar los fósiles originales de los yacimientos de la Sierra de Atapuerca, como la pelvis “Elvis” y el cráneo de “Miguelón” –en honor a Miguel Induráin– los más valorados por su magnífica conservación. Así, visitar el MEH es un viaje al pasado donde podremos ver fósiles de hasta 850.000 años, mirar a los ojos de nuestros ancestros a través de reproducciones realistas o asombrarnos con arcaicas hachas de mano.
Una oferta que se completa con asiduas exhibiciones temporales. Así, hasta finales de año tendrá lugar la interesante muestra “Cambio de imagen: Una nueva visión de los neandertales” donde se recogen diferentes piezas que parecen probar que no sólo el Homo Sapiens poseía una mente consciente, simbólica y capaz de expresarse a través del lenguaje.
Obra: Museo de la Evolución Humana de Burgos
Arquitecto: Juan Navarro Baldeweg
Producto Gala: Serie Arq suspendida
museoevolucionhumana.com