¿Cómo limpiar la ducha fácil y rápido, teniéndola igual de perfecta que el primer día? Coge lápiz y papel y apunta: este artículo contiene consejos muy útiles 😉
La ducha brillante y reluciente que estrenaste en su día, seguramente, hoy quede más bien poco. Eso es porque no siempre seguimos las pautas de limpieza y mantenimiento adecuadas en la ducha y la porcelana, el vidrio y el aluminio de la mampara o los grifos se resienten con la cal y acaban tornándose cada vez más opacos. Además, algunos productos de limpieza pueden provocar daños en las superficies, que acaban adquiriendo un aspecto envejecido.
Aunque ya os contamos hace poco cómo limpiar el baño, hoy nos centraremos en la ducha. Y es que, es muy importante saber cómo limpiar adecuadamente los diferentes elementos de la ducha para garantizar su buen mantenimiento.
El plato de ducha
Para una correcta limpieza del plato de ducha solo necesitas tres elementos: una esponja suave, jabón y agua. ¡Nada más!
Algunos detergentes y limpiadores, por su alta concentración, pueden dañar la superficie del plato de ducha por contener productos abrasivos o disolventes. Sin embargo, el resultado en cuanto a limpieza del plato de ducha con un jabón poco concentrado es prácticamente el mismo y la durabilidad del plato de ducha queda garantizada. Y, por cierto, es conveniente secar el plato de ducha justo después de su limpieza, para evitar que se formen placas calcáreas y la formación de moho. Limpiar el moho de la ducha puede ser más difícil de lo que imaginas.
En el caso de los platos de ducha acrílicos, si se produjese algún arañazo superficial accidentalmente, recuperarlos es muy fácil: pasando un pulimento exento de disolventes por la superficie quedará –casi— como el primer día.
La mampara
Para limpiar la mampara de ducha hay dos factores fundamentales a tener en cuenta: el vidrio y la perfilería.
- Para limpiar una mampara de ducha de cristal (cristal templado), el truco para evitar la acumulación de restos de cal es pasar un paño —eso sí, que no deje pelusas— después de cada ducha. ¡Es infalible! Conseguirás mantener el brillo del vidrio por más tiempo de forma natural y la limpieza de la mampara será mucho más fácil. A la hora de limpiarla, con un limpiacristales sencillo y un paño es suficiente, quedará genial. Pero si tienes problemas de cal incrustada en la mampara, el mejor truco para limpiarlas es como hacían nuestras abuelas, con una mezcla de dos partes de agua por una de vinagre.
- Si en tu caso quieres limpiar la mampara de ducha de plástico (superficies cromadas o lacadas de la perfilería) se limpian con un paño húmedo ligeramente enjabonado. La mampara Step, de Gala, además, ofrece fácil acceso de limpieza a la perfilería, pues permite separar de forma muy sencilla y segura la puerta del perfil inferior.
Aunque, evidentemente, nada tan fácil para minimizar el trabajo de mantenimiento de la ducha que elegir una mampara con mínima perfilería, como la de esta imagen:
Es el modelo Walk-in N y, sí, lo sabemos: es perfecta para todos los ambientes.
La grifería
Por último, pero no menos importante, la grifería. La limpieza periódica de la columna de ducha debe hacerse con un paño suave y agua jabonosa. Eso sí, en este caso hay una consideración a tener en cuenta: es imprescindible secar siempre las piezas de grifería inmediatamente después de su limpieza.
Evidentemente, también es posible limpiar la columna de ducha con geles anti-cal o limpiadores específicos, pero tras su uso hay que enjuagar bien la pieza de grifería con agua limpia. ¡Ah! Y ten siempre la precaución de aplicar el producto en la esponja o trapo, nunca pulverizarlo directamente sobre la columna de ducha, pues se podría dañar el acabado.